“QUIERO DEJAR EN LETRAS MI EXPERIENCIA PARA QUE OTROS ENCUENTREN UN INSTRUMENTO DE AYUDA, EN LA BÚSQUEDA INDIVIDUAL QUE CADA SER HACE”
La reconocida y querida empresaria, comunicadora, productora y especialista en marketing, Luzmila Casique lanzó su libro que tituló como “El Origen del Éxito” , de la mano de la editorial PanHouse, incursionando en una faceta que le apasiona para dejar como fruto un valioso legado que inspire a otros a avanzar, a superarse, sin detenerse ante los obstáculos que la vida, la cotidianeidad , nos presenta en el acontecer diario.
Para Luzmila Casique, ¿dónde está o dónde reside el origen del éxito, basada en su experiencia de vida profesional y personal?
Para Luzmila Casique el éxito es el goce, la satisfacción, el disfrute de haber hecho todo con honradez, con honestidad e integridad. Con relación al éxito, en la vida es preciso estar enfocados, porque esto nos permite establecer la ruta de las prioridades que tengamos para alcanzarlo. Asimismo, es importante medir los esfuerzos, esos que nos conducen hacia el éxito y luego cuidar la energía. Si los seres humanos no cuidamos la energía que necesitamos para poder alcanzar el éxito, es muy difícil controlar los pensamientos, que son los hacedores de motivación, pero también los que nos paralizan. La perseverancia es otro de los ingredientes del éxito. Yo la llamo crear, pensar, prepararnos y accionar, porque, no hay éxito sin acción. Por último, no puede haber éxito si no buscamos la esencia de nuestro ser. El éxito está en nuestro interior, está en nuestras habilidades, por eso, todos tenemos la capacidad de ser exitosos, todos llevamos un líder dentro, pero el reconocimiento de nuestro ser interior, que es hacedor por excelencia, es determinante en la ruta que vamos a transitar”, subrayó la escritora al definir el éxito , que todos deseamos alcanzar, a lo que añadió, “Nos perdemos en el camino porque no logramos sentirnos seguros, no establecemos prioridades, no estamos lo suficientemente preparados física, emocional y psicológicamente, nuestra energía no está vibrando al mismo nivel de nuestros pensamientos, o nuestras acciones no van en coherencia con nuestro corazón. El éxito debe responder a la unidad que somos, porque somos una unidad: alma, cuerpo, mente, espíritu; no están separados, todos estos elementos deben actuar de forma coherente, y esto es lo que convierte al hombre en un ser espiritual. Nuestra esencia, por naturaleza, siempre está limpia y abierta a recibir, a crecer, a desarrollarse, todo con el fin de alcanzar la paz, el gozo, la satisfacción plena. El éxito no es un lugar a donde llegar, el éxito es el camino que transitamos para llegar a la plenitud. No hay hombre exitoso si no es pleno, aunque esté rodeado de riqueza material, porque la esencia y la naturaleza humana no busca riqueza material, busca el equilibrio, la sanidad, busca la belleza de la esencia. Solamente una senda andada con transparencia, con claridad, reconociendo los errores, pero también haciendo el trabajo de transformación, es lo que nos permite llegar al camino del éxito. No hay éxito si no nos conectamos con nuestro origen. Es importante la conexión con el origen, y es lo que digo en mi libro”, concluye.
¿Cuál ha sido la fórmula del éxito para Luzmila Casique en su trayectoria?
En mi libro El origen del éxito hablo de mi visión del éxito y cómo he emprendido el camino para llegar a decir hoy que siento gratitud, paz y serenidad por alcanzar todas o casi todas las metas propuestas. Que el éxito no ha sido una meta para Luzmila, ha sido el camino que he recorrido, en el cual he sido constructora y líder de proyectos que marcaron historia y que aún siguen vigentes, algunos en el tiempo y otros en el recuerdo. Un camino en el que pude inspirar a mi entorno y ser maestra, pero también alumna, hija, madre, esposa, hermana, amiga, ciudadana. Es un camino al éxito en el que pude reconocer que nada se logra en solitario, porque como dice Albert Einstein: “El interés compuesto es la octava maravilla del mundo y todos estamos en el bucle de retroalimentación que está en todo lo que hacemos y como lo hacemos”. Es así que el 20 % de nuestras acciones crean el 80 % de las reacciones. El éxito se logra paso a paso y pocas veces pensando en el resultado económico, porque existen muchas cosas para valorar el éxito y la más importante es conectarnos desde el origen para entender qué debemos hacer, por qué y para qué. El éxito para Luzmila está en levantar mis ojos al cielo y sentir a Dios cerca de mí, caminar y sentir como si estuviera besando la tierra con mis pies. Desde mi soledad agradecer la consciencia que el camino me ha permitido obtener. En conclusión, el éxito es siempre buscar y honrar el origen.
A su juicio, ¿por qué es necesario detenernos y mirar hacia nuestro interior? Incluso para conservar nuestra salud.
Hay momentos en los que debemos parar o la vida lo va a hacer por nosotros. Esto es cuando nos sentimos débiles, cansados, cuando necesitamos ayuda, cuando enfermamos, cuando sentimos que hemos perdido el rumbo. Hay que parar para hacer la debida reflexión, conseguir el espacio necesario para cobrar ánimo, serenidad y para reencontrarnos con nuestro propósito de vida. Debemos estar conscientes siempre de que nuestro cuerpo, nuestro espíritu, nuestro ser entero necesita un espacio de reflexión. Cuando tenemos mayores responsabilidades es cuando más tenemos que pensar cómo podemos tener estabilidad y un nivel de energía elevado. Las cosas llegan, la abundancia llega, y a veces no sabemos manejarla, nos sobrepasa energéticamente, nos sobrepasa en el plano de nuestra capacidad, entonces, nos exigimos demasiado y queremos darle respuesta a todo lo que llega y no es correcto, tenemos que detenernos y pensar, desconectarnos. Para que valga la pena, esa parada debería tener el propósito de encontrarnos y de hallar a su vez la serenidad, esa conexión interior que es tan necesaria, para encontrarnos con la energía superior, para reconectarnos, puntualizó Casique.-
La autora compartió su fórmula personal que le impulsa a continuar hacia adelante, cuando se ha sentido débil ante circunstancias de la vida, como nos ocurre a todos: “en mis momentos de debilidades pienso y visualizo que soy una fuente de energía que necesita recargarse todos los días con la fuente superior, que es Dios. Yo lo hago a través de la meditación y la oración y hay muchas formas de hacerlo, como la contemplación, entre otras. A veces decimos, en medio de la carrera en que vivimos, que no tenemos tiempo, amanece el día y cada vez se reduce más el tiempo de reconexión. Hoy, con las redes sociales y este mundo mediático que nos atrapa, y con los problemas diarios y la cotidianidad, nos vemos envueltos en un quehacer permanente y no nos detenemos a pensar de manera serena. Yo lo viví. Mis alas estaban abiertas alzando el vuelo y llegó un momento en que mi cuerpo colapsó. Lo estaba haciendo, pero no estaba conectada. Y nos pasa a todos. De ahí las situaciones difíciles que experimentamos, no sabemos cómo hacerlo y nos derrumbamos. Un ejemplo que yo utilizo siempre es que no importa la tormenta que llegue, que tengamos la suficiente flexibilidad como para caer al suelo y volvernos a levantar como lo hace el bambú, que se dobla, golpea el suelo, pero se levanta de nuevo con más fuerza, porque el golpe mismo lo levanta. Y no ser como un roble, que aparenta ser muy fuerte pero que en medio de una tempestad se cae para no levantarse nunca más. Tenemos que estar enraizados en la tierra y con la mirada puesta en el cielo para elevarnos junto con la conexión. Nuestra biología perfecta nos enseña con el reposo nocturno la importancia de hacer una parada obligada para regenerarnos en espíritu, alma y cuerpo. La cuántica nos enseña que dentro del día abramos espacios para meditar por lo menos tres minutos con buena respiración. ¿Qué es lo que logramos con ello? Automáticamente recuperamos la capacidad de respuesta ante cualquier situación difícil. La parada es poderosa, nos hace poderosos. ¿Qué importa detenernos un momento en el camino ante la brecha que se abre? Lo que no debemos hacer es seguir adelante aún viendo la brecha, porque nos vamos a caer y nos va a costar mucho levantarnos.
El Autoconocimiento es Vital
La reconocida comunicadora y productora afirma que haber escrito su libro es una meta que anhelaba alcanzar, y que a base de disciplina y constancia logró, con mucha satisfacción: “El origen del éxito es producto del sueño de una niña realizado por la mujer. Hace rato mi corazón me decía y el pensamiento insistía en que era el momento de escribir el libro soñado y anunciado en la infancia.Llegó el momento de la mano de un sentimiento de amor que accionó para hacerlo posible, la necesidad de agradecer todo lo que la vida me ha dado y compartir con mis letras la visión de lo que hace posible construir un camino de éxito y lo que significa transitar desde el origen. ¿La intención? Dejar en letras mi pensamiento, mi experiencia, para que otros puedan encontrar en el libro un instrumento de ayuda en la búsqueda individual que cada ser hace en su camino de vida. Saber que mi libro puede inspirar, estar cerca de alguien que necesite encontrar una palabra que se convierta en luz para iluminar su camino, me llena de vida e ilusión, porque ese es su propósito, así como dejar un legado para mis hijos, nietos, sobrinos, para las nuevas generaciones, de tal manera que cuando mi cuerpo se transforme, mi espíritu haya quedado grabado en cada letra. Por último, El origen del éxito me permite hacer mi propio viaje interior para encontrarme de cerca el tesoro preciado de todo ser: su niño interior”, afirmó Luzmila al confesar el objetivo que tiene su libro, como un valioso aporte que conduce a la reflexión y a la búsqueda de nuestro propósito.
¿Cómo aborda en su libro la igualdad entre el hombre y la mujer como consejo que nos inspire a nosotras las mujeres a comernos el mundo a cualquier edad y circunstancia?
La igualdad de género logró que la mujer se sintiera libre en su propia identidad. La mujer aprendió a hacerse independiente y coherente en la manera como siente y ve el mundo, siendo transparente con la pareja, el entorno, y lo más importante, con su propio yo. Así lo digo en mi libro, afirmó , y continuó para explicar: se trata de la superación y la libertad sin olvidar el respeto hacia la figura masculina y la necesidad de construir un mundo donde somos iguales, aceptando las diferencias físicas y psicológicas que hay entre nosotros, respetando los valores y la importancia que tiene el rol masculino en la sociedad. Actuando de esa manera no estamos trasgrediendo la naturaleza y entendemos el porqué de la raza humana. Es imposible que la mujer pretenda empoderarse sin reconocer que somos nosotras las responsables de hacer hombres que respeten y valoren a la propia mujer.Una niña que crece respetando el orden familiar y exigiendo respeto y libertad para crear, será una mujer poderosa y capaz de transformar su entorno.
¿Por qué es importante reconocer nuestra misión en la vida? ¿Cuál es la misión de Luzmila Casique? ¿Ha logrado cumplirla?
Reconocer nuestra misión de vida no es algo místico, es imprescindible y psicológico, es una cuestión del día a día. Es el propósito que tenemos de construir nuestro camino donde están nuestros valores, principios, fortalezas, debilidades. Es tener una visión clara de lo que somos y hacia dónde queremos ir. Es conocernos para saber lo que nos contiene y poder transitar con la certeza de que estamos yendo por el camino correcto. La misión de vida se construye con todo lo que somos y tenemos, incluye nuestra familia, creencias, inclinaciones, ideas más profundas. Si nos detenemos en el silencio y con calma buscando la paz y siendo observadores de nuestro recorrido, y viendo cómo nuestro instinto, como un guía, fue marcando el camino, será una manera de encontrar respuesta a la pregunta si que si estamos cumpliendo o no nuestra misión de vida.
¿Qué le falta por hacer a Luzmila Casique en el ámbito profesional y personal? En este sentido, tras escribir y lanzar este valioso libro, ¿cuáles son sus otros proyectos inmediatos?
Yo sigo haciendo un alto a diario para adentrarme en mi ser y encontrar la guía a mi misión de vida. Será así hasta el final de mis días. Cada día hay retos que cumplir, corazones que aliviar, lecciones que aprender y enseñar, como el sembrador que deja granos de mostaza en el camino. Mientras estamos respirando y nuestro contenedor vive, tenemos la valiosa tarea de ejercitar el rol que nos corresponde en el espacio donde nos encontramos. Todos tenemos un rol en nuestra familia, en nuestro entorno laboral o empresarial, en la sociedad, y debemos estar conscientes de que somos parte de esa malla que se debe tejer desde el amor. Seguiré ejerciendo mi rol con los retos que las circunstancias me traiga y compartiendo mi experiencia con las personas que lo necesiten.
Al realizar un balance de su vida profesional, ¿se arrepiente de algo, una experiencia en particular que evitaría vivir si tuviera la oportunidad de hacerlo?
No puedo arrepentirme de nada de lo vivido. El camino recorrido ha sido parte de mi aprendizaje, experiencia y crecimiento. Me llevó a lo que soy hoy y a reconocer que se pueden perder cosas en el camino como posición, sueños, amores, oportunidades, seres queridos, pero ante cada una de las pérdidas y los errores quedamos nosotros. Queda nuestro ser con todos los recursos que tenemos para seguir adelante e insistir en el fortalecimiento del carácter, la firmeza de la fe para creer y confiar que poseemos lo necesario para enfrentar cualquier desafío. Agradezco a la vida todo lo que me ha dado, por los ángeles que me han acompañado en el camino, como mis padres, mi compañero de vida, que es mi esposo; mis hijos, mis nietos, mis cinco maravillosas hermanas, mi familia toda, mis amigas y amigos, mis seguidores, mis lectores… Agradezco a Dios su presencia en cada momento de mi vida, porque nunca me abandonó. Así que todo lo vivido es para agradecer y bendecir.
Sobre la autora
Luzmila Casique es una mujer que desde muy temprano en su vida tuvo claro su propósito de comunicar y tocar los corazones de las demás personas. A los doce años incursionó en el mundo de los medios impresos como columnista dentro de un periódico local de su natal San Cristóbal.
Con el tiempo fue apropiándose de más espacios comunicativos, como la radio, donde desde los quince años ya participaba de manera activa, luego conseguiría su acreditación como locutora.
Desde siempre estuvo vinculada con la labor social en ayuda a los más desfavorecidos. De esa forma consigue su primera titulación como trabajadora social. Posteriormente cursó estudios de Comunicación Social en la Universidad de los Andes y con una infinita hambre de conocimiento estudió Derecho en la Universidad Católica Andrés Bello, en Caracas.
Mientras estudiaba Comunicación se desempeñó como gerente del área comercial del Diario Pueblo, el segundo medio impreso más importante de la región. Durante su estancia en él, descubrió que el mundo de la publicidad le apasionaba, lo que la llevó un par de años más tarde a fundar su propia agencia publicitaria, RPTV publicidad y luego PCC publicidad, otra empresa dedicada al marketing y a las relaciones públicas.
Dentro de su propia agencia consiguió importantes clientes del ámbito regional, entre ellos los directores de la lotería del Táchira. Más adelante, con el propósito de expandirse se mudó a Caracas para abrir una sucursal en la capital de país.
Entre sus logros más destacados está haber posicionado la marca Kino Táchira como una de las loterías con más impacto social y comercial a nivel nacional, con un espacio televisivo que en un principio era de ocho minutos, hasta aparecer en el prime time en un programa de cuarenta y cinco minutos.
Luzmila Casique siempre estuvo ligada al mundo empresarial y gerencial, formó parte de Fedecámaras y Fedenaga, federaciones gremiales de gran impacto dentro de su natal Venezuela.
Para seguir muy de cerca las buenas nuevas , proyectos , trayectoria de Luzmila Casique , pueden hacerlo a través de sus redes sociales: luzmilacasique_oficial y web: luzmilacasique.com.