Con más de 74 años en el mercado, La Montserratina se ha convertido en un ícono de la cultura gastronómica nacional, reinventándose año tras año para ofrecer productos que satisfagan las necesidades de sus consumidores alrededor de las brasas
La parrilla es una tradición profundamente arraigada en la cultura venezolana. Es un espacio donde se reúnen familiares y amigos para compartir, reír y disfrutar de buena compañía y deliciosa comida. Y en el centro de esta tradición se encuentra La Montserratina, la opción preferida de los consumidores, que ha acompañado a las familias venezolanas durante generaciones.
Con más de 74 años en el mercado, los Artesanos del Sabor son parte de la cultura gastronómica nacional y sus productos son infaltables en los platos de los venezolanos. Más que una marca de embutidos, es un símbolo de unión, tradición, calidad y buen sabor hasta el último bocado, que ha perdurado a lo largo de los años, uniendo a las familias al calor de la parrilla y creando momentos inolvidables.
Sabor parrillero
“La mayor satisfacción de la marca es lograr que los consumidores vivan la experiencia parrillera, desde que van a adquirir los embutidos, la carne y los ingredientes, hasta que encienden las brasas con el carbón de la marca y disfrutan de los sabores parrilleros con la familia y los amigos”, señaló Verónica Maduro, Gerente Nacional de Mercadeo de La Montserratina.
Añadió que “la parrilla para la familia venezolana es momento de compartir, de alegría, sobre todo, esos atributos que hacen a la marca estar presente en esos momentos importantes y especiales”.
Verónica Maduro indicó que “es algo bien interesante para la marca, que tenemos más de siete décadas en el mercado Venezolano, nos mantenemos como ícono de la parrilla estando presentes en el top of mind y preferencia de los consumidores de las parrillas venezolanas”.
Afirmó que esto se debe a que, “el venezolano está muy acostumbrado a hacer parrilla en compañía de familiares y amigos; convirtiendo a la ocasión de consumo “Parrilla” en una tradición gastronómica importante en nuestro país, donde La Montserratina es la protagomista”.
Y allí está el éxito de La Montserratina, que se basa en su calidad y sabor único, “la calidad tan alta que tiene y su sabor icónico parrillero”, resalta Verónica Maduro.
Reinventarse cada día
No obstante, los Artesanos del Sabor se han caracterizado por estar escuchando constantemente al consumidor, para conocerlo y ofrecerle lo que busca, con calidad y con excelente sabor.
Verónica Maduro indicó que La Montserratina se esfuerza por reinventarse año tras año, ofreciendo productos que satisfagan las necesidades de sus consumidores. Es “tratar de desarrollar productos que tengan un costo interesante, con un sabor espectacular y que el consumidor efectivamente lo necesite”.
Con un variado portafolio de más de 70 productos, la marca es sinónimo de tradición y novedad, fusionando la riqueza de la cultura parrillera con la innovación constante. Su mayor desafío es seguir siendo cercana a las nuevas generaciones, sin perder su arraigo en la tradición parrillera, por lo que está continuamente innovando y adaptándose a las preferencias cambiantes de los consumidores sin sacrificar su esencia.
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